Esclerosis múltiple: del laboratorio a la clínica
La mayoría de los pacientes que sufren de Esclerosis Múltiple pueden contar una historia similar acerca de cómo comenzó su enfermedad: a sus 35 o 40 años, todo iba bien y nunca habían tenido ninguna enfermedad grave; un día despierta con sensación de hormigueo en las manos, o no veía muy bien, o en algunos casos no podía mantener el equilibrio. ¿Qué pasa?