Nuevas perspectivas para el estudio del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad

Publicado: 10 de Julio de 2018

En Chile, entre un 3 y 15 por ciento de niños en edad escolar (entre 6 y 12 años) son diagnosticados, año a año, con Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH)

Gracias a la reciente adjudicación de un Fondecyt Regular 2018, un grupo multidisciplinario de investigadores, entre los que destacan psicólogos, ingenieros y trabajadores sociales, desarrollarán el proyecto The contribution of the arousal and vigilance systems in the Attention Deficit Hyperactivity Disorder (ADHD): an experimental study que, por medio de diferentes técnicas, busca entregar protocolos claros para mejorar el diagnóstico del Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) y proporcionar un método de intervención alternativo a la farmacología.

En Chile, entre un 3 y 15 por ciento de niños en edad escolar, entre 6 y 12 años, son diagnosticados año a año con Trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH). Según datos oficiales del Ministerio de Salud, entre los años 2009 y 2013 los casos de déficit atencional en el país se duplicaron, pasando de 27.659 diagnósticos en 2009 a 52.895 en 2013. Este aumento releva, entre otras, la importancia que le cabe al proceso de diagnóstico de este trastorno y que, hasta ahora, no responde a procesos claros y objetivos.

Para la docente e investigadora de la Universidad Autónoma de Chile, Dra. Diana Martella, este escenario es el que los llevó a ella y otros investigadores a presentar un proyecto Fondecyt cuyo objetivo es, por una parte, evaluar qué es el TDAH y obtener perfiles tanto conductuales como corticales y, por otra, desarrollar una intervención con fotoestimulación que pueda ser alternativa o complementaria a los otros tratamientos que actualmente se utilizan. “Podríamos definirla como ‘más original’ porque es una intervención que se utiliza en estudios de privación de sueño o alteración de los ritmos circadianos”, señala la psicóloga.

[AUDIO] “Queremos ver cómo se hace el diagnóstico en Chile y proponer un protocolo de diagnóstico para que, si se va a decir que un niño tiene o no TDAH, tenga pruebas que lo respalden”

“Aquí [en Chile] está el problema de cómo se hacen los diagnósticos. Es decir, hay un sobre diagnóstico y muchas veces compruebas que no son muy objetivos. Entonces, queremos ver cómo se hace el diagnóstico en Chile y proponer un protocolo de diagnóstico para que, yo misma, en mi proyecto, para evaluar si este niño tiene o no tiene TDAH, tenga una serie de pruebas” indica Martella haciendo hincapié en la utilidad de la investigación que lidera.

El proyecto, que fue adjudicado recién en diciembre de 2017, comenzó hace solo dos meses atrás y aún restan tres años de investigación en los que esperan aclarar, por ejemplo, “cuáles son los tipos de atención disfuncionales en el TDAH y, sobre todo, poder obtener un perfil conductual y cortical en los niños con este diagnóstico. En este caso, nosotros evaluaremos una hipótesis que dice que estos niños podrían tener un bajo nivel de arousal [activación fisiológica del organismo]” declara la investigadora.

Diagnóstico indiscriminado

Uno de los grandes problemas que tiene este trastorno es, justamente, el alto índice de diagnóstico y de medicación asociada a la misma. Para la psicóloga y directora del magíster de neurociencias de la Universidad Autónoma de Chile, Dra. Rocío Angulo, “hay una confusión respecto al trastorno de la hiperactividad. La gente asimila los problemas de comportamiento con el déficit de atención, con ese componente de hiperactividad, que no necesariamente es parte del trastorno. El corazón del trastorno son los problemas de atención y no los problemas de hiperactividad, que puede o no estar presente”.  En este mismo sentido, Martella indica: “De hecho, la hiperactividad es uno de los síntomas que desaparece con la edad, mas no el problema atencional, que en adultos se da con abuso de sustancias, problemas sociales, relacionales o conductas de riesgo”.

[AUDIO] “Hay una confusión respecto al trastorno de la hiperactividad. La gente asimila los problemas de comportamiento con el déficit de atención, con ese componente de hiperactividad, que no necesariamente es parte del trastorno. El corazón del trastorno son los problemas de atención y no los problemas de hiperactividad, que puede o no estar presente”.

Respecto al sobre diagnóstico, Angulo es crítica y enfatiza: “En Chile, particularmente, hay una serie de políticas públicas y sociales que, dependiendo de los números que uno tiene en la sala con determinado trastorno, se reciben más o menos fondos de algún tipo. Esto afecta al sobre diagnóstico, además de que los agentes que los hacen, generalmente, no son expertos”.