Sociedades en movimiento

Uno de los principales aportes del sociólogo británico John Urry (1946-2016), proviene de la importancia del paradigma de la movilidad para dar cuenta del desarrollo de sociedades en movimiento, donde objetos ideas, personas y actividades requieren de la movilidad -como categoría multifactorial que implica pensar, sentir y reflexionar el devenir de sociedades globales-, para transformarse en un sistema social en sí.

Dr. Hernán Riquelme Brevis. Investigador asociado al Instituto Estudios Sociales y Humanísticos (IdeSH), Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades, Universidad Autónoma de Chile.
Dentro de las diversas prácticas que han sido analizadas desde el paradigma de la movilidad, el turismo adquiere un papel cada vez más protagónico en la sociedad contemporánea. En este sentido, la movilidad turística se define como aquella práctica de viaje que se desarrolla con fines de autorrealización en un espacio-tiempo vinculado al ocio (Riquelme Brevis, 2020).
 
En primer lugar, resulta necesario analizar el turismo como una experiencia en sí y en estrecha relación con la autorrealización. En este punto, la historia de la humanidad implica un permanente encuentro entre el cultivo del cuerpo y la mente, donde el ocio se torna trascendental. Desde la Antigua Grecia hasta los días actuales, los momentos de ocio han sido tensionados, cuestionados y debatidos por diferentes teóricos.
 
La reivindicación y la negación de actividades de ocio responderá a las culturas y los modos de vida de las sociedades. Al respecto, existe cierto consenso entre los investigadores del ocio al plantear que, en el mundo occidental, se tiende a poner en el centro de la vida el trabajo, dejando al margen otras actividades igual de relevantes. Esta visión lineal y con énfasis en lo productivo se contrapone con la versatilidad y circularidad de ciertas culturas donde el ocio cumple un papel central en la vida cotidiana.
 
En segundo lugar, la movilidad debe ser comprendida como una práctica, que trasciende la conexión de diferentes puntos en el espacio urbano. De esta forma, parafraseando a Gutiérrez (2012), la movilidad no solo involucra el tiempo de viaje, sino que el pre-viaje y el post-viaje son igual de relevantes para pensar y percibir la movilidad. La planificación del viaje turístico (selección del destino, compra de pasajes, reserva de hospedaje, compra de boletos para visitas, movilidades virtuales de reconocimiento de lugares, entre otras acciones) cumple un papel igual de relevante. Asimismo, el retorno a la residencia habitual (las conexiones, los tiempos de espera, entre otras acciones) también es forma y parte de la movilidad turística.
 
En tercer lugar, y desde la síntesis de los dos puntos anteriores, movilidad y turismo deben considerarse de manera simbiótica. Ambas categorías se potencian y permiten ampliar la perspectiva analítica, lo cual robustece y expande la capacidad reflexiva de la movilidad turística, como también sus objetos y enfoques de investigación. Las movilidades turísticas albergan diferentes entradas analíticas como rutas, experiencias, movimientos, mercados, culturas, objetos, ideas, lugares, tecnologías, globalización, entre muchos otros, que pueden ser analizados de manera particular, general o mixta para caracterizar cómo, por qué y cuándo se desarrollan este tipo de prácticas.
 
A partir de los tres ejes mencionados, tanto las experiencias como los objetos que se encuentran en las movilidades turísticas conforman una línea de investigación aún incipiente en nuestro contexto sudamericano, donde poco a poco los académicos y gestores turísticos comienzan a interesarse por este fenómeno social.
 
Finalmente, desde el proyecto ANID-FONDECYT 3200682 “Visitantes en movimiento: Etnografía de las prácticas y experiencias de movilidad en las zonas Lacustre, Andina, Continental e Insular-Costera de la Región de Los Lagos, Chile”, instamos a aquellas y aquellos que estén interesados en esta temática a seguir reflexionando y creando espacios de discusión, sobre todo en el actual contexto de crisis sociosanitaria, donde el turismo necesita repensarse y problematizarse.
 
Referencias
Gutiérrez, A. (2012). ¿Qué es la movilidad? Elementos para (re) construir las definiciones básicas del campo del transporte. Bitácora Urbano Territorial, 21 (2). Extraído de https://revistas.unal.edu.co/index.php/bitacora/article/view/29076
 
Riquelme Brevis, H. (2020). “Movilidades turísticas en contexto de crisis sanitaria”. Extraído de https://ciencias.uautonoma.cl/noticias/movilidades-turisticas/
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