Estudiantes quemados: cómo el síndrome de Burnout induce conductas de riesgo en estudiantes

Publicado : 19 mayo 2021

Una nueva investigación muestra cómo el agotamiento (Burnout) en jóvenes secundarios se relaciona con un mayor consumo de alcohol, mientras que el compromiso académico disminuye estas conductas de riesgo.

Recientemente la Organización Mundial de la Salud (OMS) incluyó el burnout o “síndrome de estar quemado” en la 11ª edición de la Clasificación estadística internacional de enfermedades y problemas de salud relacionados (CIE-11) como un fenómeno ocupacional, pero que también se puede aplicar al contexto estudiantil.

En el ámbito académico se caracteriza por sentimientos de agotamiento, la o el estudiante que lo experimenta se siente exhausto debido a las demandas escolares, desarrollando una actitud cínica y distante hacia el estudio, además de sentirse incompetente como estudiante. El síndrome puede afectar negativamente el rendimiento académico y no solo aumentar el riesgo de abandonar la escuela, sino también, de incurrir en conductas transgresoras como el consumo de alcohol.

En particular, algunas investigaciones previas mostraron que jóvenes que bebían tenían más síntomas de cinismo y menos sentimientos de eficacia que los que no lo hacían, sugiriendo que el consumo de sustancias podría ser una estrategia de ajuste o afrontamiento frente al agotamiento escolar, pero ineficaz, ya que al mismo tiempo podría agravar los problemas escolares, aumentando el agotamiento.

En este sentido, en un entorno que atribuye gran valor al crecimiento educativo e impone reglas para propiciarlo, los jóvenes que no pueden manejar el agotamiento escolar y que tiene pocos recursos para afrontarlo, podrían mitigarlo reduciendo el valor que se le da a la educación, mostrando actitudes negativas hacia las reglas y desarrollando estrategias ineficaces centradas en las emociones, como beber alcohol.

Por el contrario, otros estudios han mostrado una relación positiva entre el compromiso del estudiante y el rendimiento académico, lo que podría disminuir el desarrollo de estrategias disfuncionales y comportamientos de riesgo como el consumo de alcohol, sugiriendo que el compromiso académico promueve el rechazo de conductas que infringen las normas.

Un nuevo estudio proporciona evidencia empírica de las relaciones propuestas entre el agotamiento estudiantil (síndrome de burnout), el compromiso académico, el consumo de alcohol y las actitudes de los adolescentes hacia la autoridad. En la investigación participaron 1.287 alumnos (606 hombres y 681 mujeres) de 14 a 18 años de varios institutos públicos de la provincia de Almería (España), donde cursaban 3° (55%) y 4° (45%) de educación secundaria obligatoria.

El equipo de investigación aplicó una serie de cuestionarios a las y los estudiantes, para recopilar datos sociodemográficos (edad, sexo, grado) y preguntas relacionadas con el consumo de alcohol. En conjunto con el instrumento validado para evaluar el síndrome de burnout (Maslach Burnout Inventory-Student Survey), el que contiene preguntas relativas a tres aspectos del síndrome: agotamiento emocional, cinismo y eficacia académica.

También se evaluaron los sentimientos de compromiso de los adolescentes en la escuela, a través de la Escala de compromiso laboral de Utrecht para estudiantes, con 17 ítems que abordan el trabajo académico: el vigor (energía aplicada al trabajo académico), la dedicación y la absorción (cuán concentrado e inmerso se está en el estudio). Y, por otro lado, se aplicó una Escala de actitudes de los adolescentes hacia la autoridad institucional, instrumento que se compone de dos dimensiones: actitudes positivas hacia la autoridad y actitudes positivas hacia la transgresión de normas.

Los datos recopilados fueron analizados estadísticamente y se aplicaron modelos para establecer correlaciones entre las variables evaluadas. Los resultados mostraron una correlación positiva entre dos dimensiones del burnout (agotamiento y cinismo) y la frecuencia de consumo de alcohol, es decir, las y los adolescentes con sentimientos negativos asociados al estrés escolar, por las demandas y la sobrecarga de actividades escolares, bebían más a menudo. Además, el grupo de consumidores de alcohol tuvo puntuaciones medias en dimensiones del burnout más altas que los que dijeron no beber alcohol.

Por el contrario, el compromiso académico en las tres dimensiones (vigor, dedicación y absorción) se correlacionó negativamente con la frecuencia de consumo de alcohol, siendo la última la más fuerte, lo que indica que las y los adolescentes que están inmersos en sus estudios, dedican más tiempo y esfuerzo a las actividades, y atribuyen más importancia al trabajo escolar y a mejorar su propio rendimiento académico presentan un menor consumo de alcohol. Particularmente se observaron diferencias estadísticamente significativas en vigor y absorción, donde los adolescentes que dijeron beber alcohol tuvieron puntuaciones medias más bajas que los que no lo hicieron.

Finalmente, con respecto a las actitudes hacia la autoridad institucional, la frecuencia de consumo de alcohol se correlacionó positivamente con las actitudes que propenden a la transgresión y negativamente con las actitudes positivas hacia la autoridad. Se observó que la actitud positiva hacia la agresión se correlaciona positivamente con el cansancio y el cinismo, donde este último tiene un efecto significativo en la actitud positiva hacia la transgresión, explicando el 30% de la varianza. Estudios previos demostraron que estudiantes con altos niveles de burnout pueden desarrollar conductas disruptivas, ignorando las normas del aula e incluso desobedeciendo las reglas del profesorado.

El cansancio y el cinismo se correlacionaron negativamente con la eficacia académica, el vigor, la dedicación y la absorción. La actitud positiva hacia la autoridad mostró una correlación positiva con las tres dimensiones del compromiso escolar y con la eficacia académica. El factor dedicación del compromiso tuvo un efecto directo sobre la actitud positiva hacia la autoridad institucional, explicando el 50% de la varianza, en concordancia con estudios previos que dan cuenta que los adolescentes con alto compromiso académico muestran actitudes respetuosas hacia los maestros y la autoridad, adaptándose a las reglas de la escuela.

Los resultados y conclusiones de este nuevo estudio  ponen en foco la necesidad de implementar medidas destinadas a la disminución del agotamiento entre los jóvenes y la estimulación del compromiso académico como estrategias para prevenir y reducir conductas de riesgo.

Referencia

Pérez-Fuentes, María & Gázquez-Linares, José & Molero Jurado, María Del Mar & Martos Martínez, África & Barragán Martín, Ana Belén & Simón-Márquez, María. (2021).

Student burnout and engagement: Relationship with adolescent use of alcohol and attitudes towards authority. International Journal of Clinical and Health Psychology. 21. 100225. 10.1016/j.ijchp.2021.100225. https://doi.org/10.1016/j.ijchp.2021.100225

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